Es un lindo B&B, ubicado en una zona que nos pareció muy segura y con mucha vida. Está a dos cuadras de la Piazza Bellini, la cual tiene alrededor muchos típicos y buenos restaurantes y bares, y calles peatonales con mucho movimiento de gente y muy buen ambiente. El personal muy bueno, nadie te molesta y son muy serviciales (no hay personal las 24 hs, pero claro, es un B&B), y pueden comunicarse en inglés. La decoración muy buena, impregnada de arte y literatura. Al llegar, el edificio puede provocar una mala sensación, pero una vez dentro y viviendo se entiende de qué se trata y se disfruta de que el lugar sea como es! Seguridad absoluta también al disponerse de 3 llaves para acceder al hotel, más la propia de la habitación. En cuanto al desayuno, hay que completar un rápido formulario escogiendo las cosas que quieras que te sirvan, y te lo llevan a la habitación a la hora que quieras (hasta las 10 o 10.30), aunque la calidad de los productos podrían ser un poco mejores (el café es muy bueno, de todas formas).
En resumen, totalmente recomendable!!